Las plantas en el interior del hogar, oficinas son muy decorativas además que da un excelente toque fresco y natural a cualquier ambiente; pero, también se encuentran expuestas a no poder realizar normalmente sus procesos fisiológicos debido a que en el proceso de la fotosíntesis, intercambian dióxido de carbono y oxígeno con el medio a través de los estomas (poros) presentes en las hojas es importante mantenerlas limpias par que los estomas no estén obstaculizados por tanto estas puedan realizar sus procesos sin problemas. Podemos evitar esto siguiendo los siguientes pasos es algo sencillo y económico.
Necesitas: Paños de limpieza (limpios y secos), Un rociador manual, Jugo de tres naranjas (filtrado), 1 pincel.
Pasos:
Con el paño seco y limpio quita el polvo que pueda estar depositado sobre las hojas de las plantas.
Rocía las hojas y tallos con agua a temperatura ambiente. No utilices agua muy fría para no quemar los tejidos.
Evita mojar las flores en el caso de las plantas que las posean.
Humedece un paño limpio con el jugo de naranjas y frota suavemente sobre las hojas (El jugo de naranjas funcionará como impermeabilizante y abrillantador natural.)
Ten en cuenta que algunas plantas cuentan naturalmente con una especie de pelusa protectora en las láminas de sus hojas. Estas plantas quedan exentas de limpieza, al frotar un paño y quitar la aterciopelada protección se las dañaría. Algunos ejemplos que poseen estas características son: begonia rex, violeta africana y el helecho australiano.
Para limpiar las plantas con hojas aterciopeladas, utiliza sólo un pincel para quitar el polvillo.
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