El desconocimiento de medidas para cuidar el planeta y su práctica es un problema de carencia de educación ambiental, la excesivamente alta falta de hábitos y conciencia hacia la naturaleza y medio ambiente es un problema educativo, social y obviamente cultural.
La responsabilidad colectiva en los problemas medio ambientales podemos ejemplificarla con el ejercicio llamado "la teoría de las ventanas rotas”
Esta teoría o las conclusiones que nos deja podemos trasladarla a diferentes problemas sociales más, sin embargo da mucho que pensar con el problema ambiental que acarrea la actualidad. Podemos interpretarlo de varias maneras una seria:
Si vamos caminando por la calle comiendo algo y necesitamos botar su envoltorio pero, la zona por la que se camina está completamente limpia y no hay cestos de basura la mayoría suele tomar ese papel llevarlo consigo hasta conseguir un lugar donde depositarlo; ahora bien la misma escena pero en un lugar sucio, lleno de basura ¿Qué hace la mayoría? Contribuye a la suciedad y lanza el envoltorio al suelo este caso se ve aun estando un cesto de basura presente. Evidentemente es algo que tiene que ver con la psicología humana y con las relaciones sociales. Un lugar en condiciones precarias transmite deterioro e inmediatamente desinterés y despreocupación que va rompiendo códigos de convivencia como de ausencia de ley, de normas, de reglas.
Entonces si se ve una calle con un poco de basura y se deja asi con los días ese “poco” se convierte en mas asi va acumulándose y hasta llegar a obstruir alcantarillas o desagües que estén en la calle. Si una comunidad exhibe signos de deterioro y esto parece no importarle a nadie, entonces “allí” se generará el problema. Por ahí dicen “Una ciudad limpia no es la que más se limpia sino, la que menos se ensucia” que cierta es esta frase y mas para el caso expuesto.
Mas allá de quien es el culpable de tantos problemas ambientales mejor procuremos solucionarlos, detenerlo o por lo menos no contribuir a que sigan creciendo. Cuando se quiere botar algo y hay ejemplo: Una calle llena de basura, ¡No debemos botarlo allí! Hay que sacar de la cabeza cuando vemos esta escena el “Si todos lo hacen ¿Por qué yo no?”. La solución a los problemas medio ambientales radica allí en la granito de arena que vaya suministrando cada persona con acciones quizás pequeñas pero, que al volverse cotidianas pueden solucionar más que cualquier campaña que se cumpla un solo día.
La educación ambiental es sumamente necesaria, hay que hacer lo posible por tener comunidades limpias, seguir los principios básicos de la convivencia social humana. La educación ambiental no solo implica una reconciliación de la sociedad con la naturaleza, es sobre todo un modo de ser, un modo de aprender a aprender o del deber ser. Los colegios cada vez imparten mas a los pequeños “Educación ambiental” pero, no se trata solo de colocar carteles de “No botar basura” en áreas verdes va mas allá de eso se trata de enseñarlos y que realmente lo practiquen "Los niños al colegio en verde". Asi como con los niños sucede con todos la educación ambiental hay que llevarla a la práctica cotidiana para que podamos ver cambios en nuestro ambiente, la gente inconsciente e indiferente es una parte importante del problema
Nadie se hace cargo o se responsabiliza en los actos cotidianos. Es más fácil no mirar, ser más de lo mismo o quejarse sin reparar que nuestra omisión termina en complicidad al destrozo de nuestro hábitat. Así que si ves a alguien lanzando basura a la calle dile que no lo haga, señalale un cesto de basura cercano y si no hay pues que conserve eso hasta encontrarlo; no te hagas como que no viste nada te cuesta la cultura hace las sociedades y ella hay que compartirla “enseñar a la gente”. No olvides que este problemas se soluciona así, con pequeñas acciones pero, cotidianas.
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